Hey, hey, sí aquí ando siempre, nomás viendo a las morras. Aquí siempre ando, anca Rafai, en esta esquina donde veo pasar todo, tomando mi chínguere rebajadito con coca, ¿ves aquella morra?, ves que aquí se la pasa uno a todo dar, por eso me gusta estar aquí, nomás viendo, nomás viendo.
Qué hay más qué hacer, pos nomás esto, porque en la semana agarro el traitor y le pego bonito aguantando el sol pegándome en el lomo, pero ya tardecito pos le caigo acá a la tienda del Rafai, aquí es vida, viendo nomás, para qué más que la verdad, para qué quiero otra cosa que no sea pasarla bien aquí.
He tenido muchas ondas acá, en mi vida, y pos ya chale, ya bajarle, tuve una ñora que ya no quiso acá pa acá, y pues ni modo, tuve casa y mi carcachita pero íra, ya nel todo, ya pasó, yo soy bien chido vato, íra, me agarro el traitor y chale, nadie, nadie y yo solito todo, ¿me entiendes? Ya anduve y ahora aquí ando, ya sé lo bueno y malo, éste es mi camino, estar ya bien, todas las tardes esta esquina me espera. El Rafai a veces me fía, cuando de a tiro, me voy ahí como puedo, aunque el chínguere se me suba, ahí voy, ahí voy.
El Tayaiaso nomás no jala, ése vato, siempre anda bien acá, jajaja. De caguas que me invitan casi nel, ése, íra, íra, esa morrita ayyyyy mamita, éeei, éii, no me hizo caso, es que va rápido dice, camina recio, aquella que se bajó del camión se fue pa allá, yo mejor tomo chínguere, pa que no se enojen, hasta acá me llega su olorcito, ahhh, huelen bonito a florecitas, es de aquella que allá va, ahí le tanteo para caminar y pedirle a Rafai otro rebajadito, aquí traigo mi coquita y un chorrito blanco y ya está, es la vida esto, me siento en la banqueta porque a veces me canso de ver parado, a veces las morras pasan bien cerquitas por un virote y cuando pasan, íra, casi las toco con mi mano, éii muchacha, íra, íra, y me responden, estése, borracho, cochino, y le digo, me confundes muchacha, yo, íra, íra, trabajo en el traitor, meto las manos a mi pantalón y no me hallo las llaves y ahí estoy busque y busque, y mejor me quedo aquí parado viendo pa allá, desde la esquina, ni modo, buenas noches doñita, pase por aquí, pase, ya me acordé, las dejé allá, éii mijo, ten la pelota, ahí te va, camino para una miadita, aquí en este rinconcito que nadie me ve, está oscuro, ahhhhh, ahhhh, mi coca ya se me acabó, a ver cuántas monedas me quedan pa otro chínguere, dos, tres, y aquel ni sus luces, y yo ya ando más pa allá, ese camión no bajó a nadie, sigo en esta esquina viendo pasar todo, esos ticuces tienen bien cagada la banqueta, orita voy y les sacudo el palo pa que se vayan a otro lugar, hacen mucha periquera, ya anocheció aquí, no vinieron aquellos vatos, veo todo aquí, cuando les platico me dicen que se de todo, les digo, pues sé y veo de todo desde aquí, desde esta esquina, hay muchachas que quiero platicarles pero se van, se van, no quieren que les platique, mejor me platico yo solo pa que no se me olvide, es que no quieren saber nada, está bien, está bien así, yo me sé un montonal de cosas, otro traguito de chínguere, ya mañana si llega la cruda veré, veré, espero venga el tigrón y le pido una moneda y ajusto pa otro chínguere, de mientras aquí sigo en esta esquina.