I
nuestro reino
dos habitaciones
en la planta baja de la vecindad
madre llenaba con gasolina las loncheras
mi hermana me enseñó
a rociar con ella los sueños
a desnudarme en el baño
con las hijas de los vecinos
II
al oscurecer
me esperaba en el patio
con una lonchera
y un paquete de cerillos
III
a los catorce me encañonaron
por primera vez
fue un amigo del barrio
en su viaje
yo era el demonio que
se llevaba a su hermana
y su madre
al paredón
IV
a los diecisiete mi hermana
sorteo las balas
trepando la cerca
de la iglesia
V
mis primos no tuvieron
tanta suerte
sus padres se fueron
a otro lugar sin plomo
en las calles
VI
nuestro reino
eran dos habitaciones
y un baño
dónde los sueños ardían